En la oficina podemos encontrar muchas tentaciones a lo largo del día, desde algo que picar con el café a media mañana, hasta comidas copiosas y poco digestivas a la hora de comer. Descubre algunos trucos para resistirte a estas tentaciones.
Prepara la comida en casa
Una manzana, un plátano, o algunas galletas integrales, pueden hacer más fácil que controles la cantidad de comida que consumes. Además, estarás más saciado y tendrás menos tentación de comer algo en el comedor con una cantidad alta en grasas y sal. Fíjate el objetivo de incluir todos los días verduras en tu fiambrera: tomates, trozos de pepino o de pimiento, etc.
Reuniones sanas para tu corazón
¿Hay siempre algo de picar en las reuniones de trabajo? ¡Puedes hacerlo más sano! una buena opción sería incluir frutas y verduras crudas con humus. Optar por servir jarras de agua fría con cortezas de limón, naranja, o rodajas de pepino, que le darán sabor, también puedes optar por servir zumos naturales. Estas son una alternativa saludable a las bebidas gaseosas azucaradas.
Sustituye los dulces por chicle
Siempre hay alguien que trae algo para picar a la oficina. Asegúrate de tener algún chicle cerca, siempre es más fácil decir que no a los dulces con un sabor mentolado en la boca.
¿tienes hambre de verdad o es solo gula?
A veces hacer una pausa es suficiente, no hace falta beber café o comer para interrumpir el trabajo. Aprovecha para hacer algo de ejercicio: Levántate, camina por el pasillo, estírate, sube y baja escaleras, haz unos ejercicios de respiración y ¡recarga las pilas!
Asegúrate de hacer todos los días algo que mejore la salud de tu corazón. Estimula tu energía y conseguirás una mayor productividad durante la jornada de trabajo.